Populismo, recursos naturales y debilidad institucional

Autores/as

  • Pedro Isern

Resumen

Distintas formas de populismo se han consolidado en la última década en América Latina. La génesis del fenómeno es similar: desencanto con los resultados del proceso de reforma de los 90´, auge de los precios de las commodities y baja calidad de la democracia. Las dos últimas condiciones se encuentran relacionadas.

La dinámica que se ha consolidado entre altos precios de las commodities y debilidad democrática es una versión política de “la maldición de los recursos naturales” o “enfermedad holandesa”.  Este concepto económico fue primero desarrollado por el Semanario The Economist en 1977 a partir del descubrimiento de gas hecho por Holanda en el Mar del Norte. La mencionada publicación lo define de la siguiente manera: “…This malady involves commodity exports driving up the value of the currency, making other parts of the economy less competitive, leading to a current-account deficit and even greater dependence on commodities. This matters all the more because mining and hydrocarbons are capital-intensive businesses, generating relatively few jobs."(1)

A su vez, otros analistas han introducido el concepto relacionando recursos naturales y debilidad institucional. Por ejemplo, Thomas Friedman ha estudiado  la incidencia del petróleo en las autocracias de Medio Oriente. Para el autor “La primera ley de la petropolítica postula lo siguiente: el precio del crudo y el ritmo de la libertad siempre se mueven en direcciones opuestas en Estados petroleros ricos en crudo. Cuanto más alto sea su precio medio global, más se erosionan la libertad de expresión, la de prensa, las elecciones libres y justas, la independencia del poder judicial y de los partidos políticos y el imperio de la ley. Y estas tendencias negativas se refuerzan por el hecho de que cuanto más sube el precio, menos sensibles son los gobernantes con petróleo a lo que el mundo piensa o dice de ellos..."(2)

Paso seguido, mientras por un lado Friedman menciona la relación entre ingresos extraordinarios del petróleo y fortalecimiento de autocracias, es necesario remarcar la relación entre ingresos extraordinarios de las commodities y debilitamiento de las democracias. La diferencia es relevante: mientras que en el primer caso Friedman ha descrito un fenómeno que busca la permanencia de un régimen, los populismos describen un proceso que busca distorsionar y deteriorar otro régimen, la democracia liberal.

Así, un punto analítico importante que ha introducido la versión populista basada en los ingresos extraordinarios es la paulatina distorsión en una regla básica del juego democrático: la vigencia de elecciones realmente competitivas. Definimos elecciones competitivas como la disputa en un pie de igualdad entre dos o más partidos o coaliciones. Si uno de ellos utiliza recursos públicos ordinarios para financiar su campaña estará bastardeando un precepto central de la democracia. El problema actual en distintos países de América Latina es el sistemático uso de recursos extraordinarios.

¿Por qué el populismo se ha beneficiado particularmente de esta nueva dinámica? En parte porque el fracaso de las reformas de los 90´ ha contribuido a la generación de un marco donde ha sido más sencillo señalar ganadores, perdedores y los supuestos responsables de ello. Por ejemplo en Argentina, el traumático final de la convertibilidad (diciembre 2001) ha supuesto para los nuevos populistas la oportunidad de articular una coalición política de los perdedores. Sumado a ello, se ha dado  posteriormente (desde 2004 en adelante) una coyuntura económica inédita en la historia contemporánea. Si concatenamos el fracaso de las reformas, la existencia de un grupo definido de perdedores, la posibilidad de señalar ganadores y culpables y los altos precios internacionales, es posible concluir que la calidad de la democracia no solo está amenazada sino que esa amenaza posee condiciones para mantenerse en el tiempo.

Paso seguido, es necesario preguntarse como salir de este círculo vicioso entre ingresos extraordinarios y debilidad institucional. Siguiendo esta lógica, podríamos pensar que una caída en los precios de las materias primas debiesen repercutir en una mayor fortaleza institucional. Este razonamiento lineal es obviamente falso: la hipotética caída de los precios dejaría menos recursos para profundizar determinadas políticas pero no ayudaría a modificar prácticas anteriores consolidadas.

El corto-mediano plazo posee más interrogantes que respuestas para los países envueltos en la dinámica maniquea del populismo contemporáneo. Un dato principal de las experiencias del pasado es que determinados modelos económicos tarde o temprano terminan por colapsar, pero eso no conlleva necesariamente que los actores involucrados aprendan de sus errores. Las personas o grupos aprenden de sus errores cuando poseen una referencia histórica, es decir, cuando tienen la posibilidad de comparar distintos episodios. Una de las características de los populismos contemporáneos es la capacidad que han desarrollado para re-fundar, simbólica o realmente, la vida política en países tan disímiles como Venezuela, Bolivia o Ecuador, haciendo más difícil el necesario ejercicio de la comparación. Las elecciones presidenciales en Argentina en octubre del 2011 develarán hasta que punto el neo-populismo y los ingresos extraordinarios han transformado una sociedad otrora compleja en una pobre versión del maniqueísmo.


(1) El mencionado semanario ha publicado un reporte sobre las oportunidades que el inédito crecimiento económico ofrece a la región. Uno de los artículos del reporte hace mención al papel de los recursos naturales y los posibles problemas que ello conllevaria. Ver  “Special Report on Latin America”. The Economist. 9 de septiembre de 2010. http://www.economist.com/node/16964094

(2) Friedman, Thomas. Foreign Policy. Ley de Petropolitica. 2006. Version online en español en http://www.fp-es.org/la-primera-ley-de-la-petropolitica.  En este trabajo se citan libros y papers anteriores que desarrollan la relación entre recursos naturales y crecimiento. Por ejemplo, “…Daniel Yergin The Prize: The Epic Quest for Oil, Money, and Power (Simon & Schuster, Nueva York, 1991), A su vez,. Sustaining Development in Mineral Economies: The Resource Curse Thesis (Routledge, Nueva York, 1993), de Richard Auty, explica por qué los países dotados de recursos naturales con frecuencia no logran desarrollarse. Jeffrey Sachs y Andrew Warner dan cuerpo a esta tesis en Natural Resource Abundance and Economic Growth(National Bureau of Economic Research, Washington, 1995)…”

 

*Profesor adjunto de Ciencia Política en la 
Universidad Abierta Interamericana de Buenos Aires.
Master en Filosofía Política de London School of Economics and Political Science.

Descargas

Publicado

2011-04-28

Número

Sección

Política internacional