¿Qué está sucediendo con la política en Japón?

Authors

  • Sebastián Bidegain

Abstract

El planteo de toda pregunta amerita una buena respuesta, sin embargo, he de advertir al lector que no debe buscar esta respuesta en el siguiente artículo, sino en su lugar, tal vez, más preguntas. El planteo de una pregunta genera la reflexión y en un último caso una conclusión, mediante el análisis de los datos pertinentes y partiendo de un determinado problema: en este caso, la renuncia del Primer Ministro de Japón por el Partido Democrático (PD), Yukio Hatoyama el pasado 2 de junio. 

La dimisión de Hatoyama no es un hecho ajeno a la realidad socio-económica que Japón ha estado viviendo durante estos últimos años. 

La economía del país se encuentra estancada desde hace 20 años, su deuda interna alcanza los 9 billones de dólares y aún no se han podido solucionar los problemas del desempleo creciente y de la seguridad social, con una población inactiva (envejecimiento) cada vez mayor. Socialmente, el país se está viendo abatido por una polémica en torno al traslado de la base aeronaval estadounidense de Futenma, ubicada en la ciudad de Guinowan (al centro sur de la isla de Okinawa). 

Luego de haber logrado una descollante victoria sobre el legendario Partido Liberal Democrático (PLD), el que gobernara Japón desde el final de la Segunda Guerra Mundial, en los últimos comicios del año pasado, la gestión política del ahora al mando PD parece haber ido perdiendo la fuerza primigenia que lo impulsó a la cima.  
El descenso de la popularidad del Primer Ministro Hatoyama fue contundente: desde niveles de aprobación de un 90% a comienzos de su campaña hasta un 20% el pasado junio y como telón de su actuación ejecutiva. 

El honorable cargo de Primer Ministro en Japón debe ser ocupado por una persona civil, a elegirse dentro de los miembros de la Dieta (Parlamento) y ante la cual debe comparecer. Es la principal figura del Gabinete (Poder Ejecutivo), encargado de seleccionar a los Ministros que lo conforman y de firmar cada ley y decreto que emita el organismo. Siendo a su vez el principal rostro visible del Japón ante los ojos del mundo, cabe preguntarse qué repercusiones tiene para los nipones su renuncia. 
Pero el problema se agrava al considerar que no es Hatoyama el primero sino el quinto Primer Ministro en presentar su renuncia desde el año 2006. Desde ese año a la fecha le han precedido en el cargo Junichiro Koizumi, Shinzo Abe, Yasuo Fukuda y Taro Aso.

Shinzo Abe renunció a su cargo en septiembre de 2007 tras la derrota electoral, no conseguir reforzar una misión naval de apoyo a Estados Unidos contra el terrorismo en Afganistán, y escándalos financieros que involucraban a sus ministros. Yasuo Fukuda dimitió en septiembre de 2008. Su gestión no fue capaz de dar unidad al PLD, por lo que las iniciativas de su gobierno se vieron detenidas ante la división parlamentaria. A las ya deterioradas economía y popularidad del PLD se sumó la crisis de fines del 2008, lo que dio impulso a la victoria del PD en los comicios del año siguiente y la renuncia del aquel entonces Primer Ministro, Taro Aso.

El reciente ex Primer Ministro Hatoyama encontró su Waterloo en la ya mencionada polémica sobre la base aeronaval estadounidense de Futenma. La promesa de relocalizarla hecha en el acuerdo firmado en 2006 por los gobiernos de Japón y Estados Unidos fue retomada por Hatoyama en camino a su victoria en los comicios de 2009, y la que finalmente no mantuvo por fracasar sus negociaciones con Washington. 

La susodicha base militar opera continua y permanentemente, en pleno centro de la ciudad de Guinowan, con una pista de aterrizaje de 2700 metros. La base cuenta con el 75% de la presencia militar estadounidense en todo Japón, ya que es un punto estratégico considerando su cercanía con China y Corea del Norte. 

A pesar de su relevancia militar, los ciudadanos del lugar se muestran contrarios a su permanencia. Se quejan sobre el constante ruido y peligro que representa y creen que el aeropuerto es uno de los más peligrosos del mundo. El incidente de agosto del 2004, cuando un helicóptero se estrelló contra la pensión universitaria de la Universidad Internacional de Okinawa, viene a ilustrar esta idea.  

Finalmente, el nuevo Primer Ministro de Japón es el ex Ministro de Finanzas, Naoto Kan, quien fuera escogido como nuevo líder del PD (a su vez antiguo cargo de Hatoyama) y quién asumió como Primer Ministro el pasado 8 de junio.

Kan, de 63 años, posee una muy importante trayectoria política, fue cofundador (junto con Hatoyama) del PD en 1998, y es respetado por su carácter y sus capacidades de orador. 

El punto fuerte de Kan es, por supuesto, el económico. Como Primer Ministro se ha comprometido a devolverle al pueblo japonés la confianza en el cambio y la revitalización de la economía. Es partidario de una reforma fiscal de largo plazo y aumentar los impuestos para dar mayor empuje al decaído sistema de seguridad social y combatir la deuda interna. Para llegar a cumplir el objetivo de refortalecer la economía, Kan ha sugerido devaluar el yen como medio para reactivar la piedra angular de la economía japonesa que son las exportaciones.

Sin embargo, en cuanto al relacionamiento con Estados Unidos, en especial a lo referido a la base de Futenma, ha indicado solamente que buscará una “relación más igualitaria con Washington”, lo que se entiende significa continuar con las negociaciones en pro de un acuerdo.

A casi dos meses de asumir el cargo, es difícil saber qué le podrá deparar la gestión al nuevo Primer Ministro. Tampoco queda claro si el problema de pérdida de confianza en la gestión del PD es solo consecuencia de un debilitamiento en la postura de negociación o es más bien el reflejo de un desequilibrio a mayor escala.

Los antecedentes hacen, indefectiblemente, que una gran responsabilidad caiga sobre Kan. Aparentemente está dispuesto a sobrellevarla; pero seguramente también, Kan mire con preocupación el destino de sus cinco inmediatos predecesores.


*Estudiante de la Licenciatura en Estudios Internacionales.
FACS - ORT

Published

2010-08-12

Issue

Section

Política internacional