TEA PARTY: ORÍGENES Y CARACTERÍSTICAS DE UN MOVIMIENTO QUE ADQUIERE IMPORTANCIA EN LA VIDA POLÍTICA ESTADOUNIDENSE

Authors

  • Nicolás P. Ayala

Abstract

En la madrugada del 27 de octubre, Barack Obama firmó el acuerdo alcanzado el día anterior en el Congreso, que permitió a Estados Unidos evitar el inminente default, tras 16 días de parálisis administrativa provocada por el ala ultraconservadora del partido Republicano.

¿Pero qué es el Tea Party? Para algunos se trata de un movimiento político espontáneo y descentralizado, compuesto por ciudadanos que tienen por objetivo lograr el ideal de democracia del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Otros sugieren que, por el contrario, se trata de una organización protofascista creada y dirigida por grandes capitales corporativos.

Sea cual fuere la definición que se utilice para calificarlo, el Tea Party se ha convertido en uno de los principales actores de la vida política estadounidense de la última década. Según el sitio oficial del Tea Party, esta organización se define como: “Un movimiento de bases sociales que representa la voz de los verdaderos dueños de los Estados Unidos: ¡Nosotros, el pueblo!”.

Glenn Beck, además de ser uno de los mayores financistas del movimiento, creó el proyecto 9.12 (en referencia al día después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001), en un intento por establecer nueve principios y doce valores sobre los cuales el Tea Party se sostiene, dijo sobre el espíritu de la organización: “El día después de que Estados Unidos fuera atacado, los norteamericanos no estábamos obsesionados con ‘Estados Rojos’, ‘Estados Azules’ o partidos políticos. Estábamos unidos como americanos, unificados para proteger los valores y principios de la mejor nación que jamás haya existido. Queremos que todos vuelvan a pensar y sentir como lo hicieron el 12 de septiembre de 2001”.

El movimiento del Tea Party no está registrado como un partido político y no figura en las boletas electorales. De los 535 miembros del Congreso, hacia el 6 de enero de 2013, había 47 miembros de Tea Party, todos ellos pertenecientes al partido Republicano.

Sus adeptos representan el 20% del electorado estadounidense total. En su agenda política figuran la reducción del presupuesto y déficit federal, la promoción y protección de libertades individuales y la reducción de impuestos y del sector público a su mínima expresión. Uno de los momentos históricos que reivindican, y que de hecho da nombre a su movimiento (considerado como un precedente de la Guerra de Independencia de los Estados Unidos), es el motín de los colonos del Boston Tea Party que en 1773 lanzaron al mar cargamentos de té como forma de protesta contra los impuestos que la corona inglesa gravó sobre ese producto. A partir del 2010, la bandera política de este sector ultraconservador de derecha del partido Republicano ha sido intentar bloquear la reforma progresista del sistema de salud promovida por Barack Obama.

El Tea Party comenzó a articularse en torno a las protestas de 2008 en contra del Troubled Asset Relief Program (Programa de Alivio para Activos en problemas, o TARP por sus siglas en inglés), un programa de rescate financiero firmado por el presidente George W. Bush, en octubre de ese año, para hacer frente a la crisis hipotecaria.

Pero fue durante el primer año de la presidencia de Barack Obama cuando el movimiento cobró vigor. Nuevamente se organizaron protestas en contra de una ley de rescate económico, esta vez denominada American Recovery and Reinvestment Act (Reinversión y Recuperación de Estados Unidos, o ARRA).

El 19 de febrero de 2009, en una transmisión para la cadena de noticias CNBC, desde la Bolsa Mercantil de Chicago, el periodista Rick Santelli criticó el plan de refinanciamiento anunciado por el gobierno el día anterior alegando que “promueve el mal comportamiento financiero” y que la nueva administración debería llamar a referéndum antes de “subsidiar las hipotecas de los perdedores”. Algunos de los operadores del piso alrededor de él arengaban las críticas mientras los anfitriones del estudio se reían a carcajadas. El video de Santelli se viralizó por internet, y se creó un grupo del Tea Party en Facebook donde se coordinó, para el 27 de febrero de 2009, la primera marcha a nivel nacional del movimiento en más de 40 ciudades.

Por su tendencia y capacidad de movilización, muchos analistas políticos han definido al Tea Party como “el primer movimiento de protesta callejera de derecha de nuestros tiempos”.

El Tea Party en números

Según encuestadoras estadounidenses, sus partidarios perteneces a los sectores mejor remunerados y con mayor nivel educativo de Estados Unidos. El 96% son blancos; el 68% son mayores de 50 años y el 97% son protestantes. La mayoría se identifica como “muy conservador”, y creen que Barack Obama es “muy liberal”. Y mientras gran parte de los republicanos dicen estar “insatisfechos” con la administración demócrata, los seguidores del Tea Party dicen estar “enojados” con el gobierno.

Más de la mitad de los encuestados cree que la administración Obama gobierna en favor de los pobres y en detrimento de las clases altas y medias; y un 25% cree que la gestión favorece a los negros por encima de los blancos.

El 92% cree que el actual presidente de Estados Unidos está llevando al país hacia el socialismo. Kathy Mayhug, una jubilada de 67 años dijo al New York Times: “Creo que se está apartando [Obama] de los valores nacionales. Es un socialista. Y para ser sincera, creo que es un musulmán y que está tratando de hundirnos”.

La totalidad de los encuestados dijo no querer conformar un tercer partido político, y dicen votar casi siempre por el partido Republicano. El 57% tiene una opinión favorable del expresidente Bush. Este mismo porcentaje, pero en sentido contrario, es el que tiene la opinión pública general respecto del expresidente norteamericano.


Sobre el autor

Lic. en Ciencia Política,
Alumno del Máster en periodismo
del diario La Nación y la
Universidad Torcuato Di Tella.

Published

2013-11-07

Issue

Section

Política internacional