Elecciones europeas 2009

Autores

  • Marcos Gabriel Rodríguez

Resumo

El pasado domingo se dieron los resultados de los comicios para elegir representantes para el Parlamento Europeo. Comicios que nunca despiertan demasiada atención para el electorado del Viejo Continente, pero que en todo caso sirven para tomarle el pulso a la situación política de la Unión en general y de los países en particular. Y es que los votantes, más que pensar en quién debería representarlos en el órgano comunitario, encaran más la elección desde un punto de vista premio-castigo a sus respectivos gobiernos: de este modo, lo supranacional se nacionaliza.

En cuanto a los resultados generales –que como dijimos al europeo medio poco importan- vemos una debacle del bloque de partidos socialistas, y un mantenimiento de la hegemonía de los partidos conservadores y liberales.

¿A qué se debe esto? Muy simple: los gobiernos de la derecha europea (Sarkozy, Merkel, y en menor medida Berlusconi) han sabido mantener su popularidad mientras que las administraciones socialistas de Zapatero y sobre todo Gordon Brown se derrumbaron por escándalos de carácter interno. Vayamos por partes.

El PSOE español, a pesar de los hábiles malabares de un cada vez más maduro Zapatero, no ha sabido explicarle –tampoco es que tenga demasiado espacio para ello- cómo, prometiendo el pleno empleo en la campaña electoral pasada, ahora los desempleados superan ampliamente los cuatro millones. Esto ha servido de pretexto para que no sólo el PP, sino también los nacionalismos periféricos de todo color, hayan buscado votos a los hachazos de un árbol a punto de caer.

Pero si hablamos de derrota socialista en España, lo que sucedió en el Reino Unido puede definirse como mínimo de hecatombe. Ya habíamos hablado en esta publicación del nulo carisma de Gordon Brown para dirigir los destinos de la Pérfida Albión; lo único que faltaba era algún escándalo. Y el mismo llegó de forma contundente: decenas de parlamentarios –sobre todo laboristas- renunciando por maniobras financieras un tanto incorrectas, varios ministros separados de sus cargos, y el pedido sistemático de la oposición y muchos laboristas de la dimisión del Primer Ministro. El Partido logró sus peores resultados desde la Primera Guerra Mundial, quedando por detrás de los conservadores, los euroescépticos y empatando con los liberal-demócratas.  Nadie se explica a ciencia cierta para qué permanece Brown en el cargo y no termina con su suplicio y el de su fuerza política renunciando de una buena vez.

Otro caso que merece nuestra atención –por lo bizarro- es el de los resultados en Italia. Como es bien sabido, Berlusconi, el Mesías de lo políticamente incorrecto había sufrido dos golpes a su integridad como persona. Primero el divorcio pedido por su segunda mujer, luego de tratar a Il Cavaliere como un machista pervertido (esto por haber colocado en las listas electorales a modelos y presentadoras de televisión de “presencia” destacable). Segundo, unas fotos donde Berlusconi se lo pasa muy bien en su mansión con la compañía de algunas jóvenes, que en parte eran las que habían ido a parar a las susodichas listas. Il Cavaliere contraatacó esgrimiendo que no cometía ningún delito y que las fotos eran un atentado a su privacidad, cosa en la que le damos la razón porque al fin y al cabo no se trata de ningún obispo y el hedonismo moderado no es impedimento para ejercer un buen gobierno.

Estos detalles refrescantes de la simpática política italiana no tuvieron gran repercusión en el electorado. Si bien Berlusconi esperaba más votos para su partido personal, si sumamos sus resultados con sus aliados de la también bizarra Lega Nord, la derecha vence nuevamente a la izquierda por enésima vez.

Quedan, por supuesto, muchos más detalles que por falta de espacio no desarrollaremos. Como el ascenso de lo que ahora se llama “derecha populista” (la que quiere echar a los inmigrantes y vende un discurso anti-establishment), o el hundimiento del socialismo francés amén el ascenso del partido ecologista. Temas que se tocarán en el futuro, cuando se aproximen las elecciones nacionales propiamente dichas.

 

* Estudiante de la Licenciatura en Estudios Internacionales. 
FACS - ORT- Uruguay.

Publicado

2009-06-11

Edição

Seção

Política internacional